Tirnoch | |
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Información Básica | |
Raza | Dragón/Fae |
Género | Mujer |
Localización | Amethyn |
Tirnoch es un PNJ en Kingdoms of Amalur: Reckoning.
Descripción[]
Tirnoch, conocida por Gadflow y sus huestes tuatha como la Diosa bajo la Montaña y Tirnoch la misericordiosa, es la verdadera antagonista de Kingdoms of Amalur: Reckoning.
En realidad, Tirnoch no es una diosa, sino una Fae extremadamente vieja que puede adoptar la forma física de un dragón y que fue sellada hace varios miles de años antes por los antiguos Alfar en las profundidades de Amethyn, bajo la capital de la Corte del Invierno, Bhaile (muy probablemente, antes incluso que los propios Fae del Invierno se asentarán en la región).
Al haber estado aprisionada durante tanto tiempo, Tirnoch no sólo quiere vengarse del mundo por sellarla, sino que también se ha vuelto completamente demente. Con el sello que la mantiene atrapada debilitado, ella (o quizá Gadflow) consiguió llegar a él. Nunca se podrá saber si Tirnoch le retorció la mente o si esta ya lo estaba, pero consiguió ganarse la lealtad de Gadflow.
Con su poder, Gadflow masacró los miembros de la Corte del Invierno, y cuando los héroes del invierno se alzaron para vengar a su rey y acabar con él, Tirnoch usó sus poderes y los empaló sobre enormes astillas de cristal prismático. También usó sus poderes para interrumpir el Gran Ciclo y parar las resurrecciones de aquellos en contra de Gadflow y sus tuatha.
Cuando la organización secreta para la cual el Sin Destino y Alyn Shir trabajaban descubrió los murmullos de los tuatha sobre su nueva diosa, Tirnoch, el Sin Destino se presentó voluntario para la misión de asesinar a Gadflow y volver a sellar el dragón demente, a pesar de las advertencias de los tejedores del destino de que sólo encontraría la muerte. Aunque no se saben todos los detalles, el Sin Destino murió en el transcurso de la misión pero ese no sería el final.
Aunque Gadflow demostró ser útil ayudando a debilitar el sello de Tirnoch y habría sido capaz de liberar completamente a Tirnoch de su prisión eventualmente (según las palabras de Alyn Shir en Bhaile), Tirnoch escogió otro peón para su liberación final. Usando su poder, liberó al Sin Destino de su lugar en el tapiz del destino y hizo que fuera resucitado en el Pozo de las Almas de Fomorous Hugues. Esto otorgó al Sin Destino la capacidad de cambiar el destino y absorber los destinos potenciales de los demás. Tirnoch sabía que el Sin Destino volvería al lugar donde todo empezó eventualmente, rebosando un tremendo poder de todos los destinos que había absorbido, por lo que había planeado matarlo una segunda vez y usar el poder que había adquirido para liberarse a sí misma de una vez por todas.
Desgraciadamente para ella, el gran poder del Sin Destino demostró ser demasiado para Tirnoch, resellándola y evitando su liberación. La derrota de Tirnoch significó el fin de la Guerra del Cristal (aunque a excepción de unos pocos, nadie supo nunca de la existencia de Tirnoch como un ser real) y liberó completamente Amalur del tejido del destino.
Localización[]
Amethyn, el lugar entre el plano mortal y el plano mágico, bajo la capital de los Fae del Invierno, Bhaile.
Misiones[]
Notas[]
- El cristal prismático es, en realidad, una manifestación física de los poderes de Tirnoch en el plano mortal de Amalur. Mientras el sello sigue siendo fuerte, es como cualquier otro cristal, pero a medida que se acerca su liberación, el cristal prismático gana poder y empieza a crecer a un ritmo accelerado, como el momento en que el Sin Destino y Alyn Shir corrían hacia Bhaile.
- Es muy posible que los tuatha supieran de Torre Allestar por parte de Tirnoch.
- El tejido del destino parece estar ligado a Tirnoch o al menos, su poder parece tener un fuerte efecto sobre este, posiblemente como un tipo de maldición sobre todos los seres vivos de Amalur. Esta conjetura parece ser cierta, ya que Agarth y los demás tejedores del destino son incapaces de leer el tejido del destino una vez Tirnoch es derrotada.
- Otra posiblidad es que Tirnoch estuviera destinada a ser liberada y ser victoriosa, por lo que su derrota a manos del Sin Destino rompió en pedazos el tejido del destino.